sábado, 30 de abril de 2022

Tercer Domingo de Pascua

 

Para este Tercer Domingo de Pascua, continuamos aprendiendo de Jesús a través de la experiencia de los apóstoles, en cada encuentro con el Resucitado, leamos con atención:

 

Evangelio según san Juan 21, 1-19:

Después de esto, Jesús se apareció otra vez a sus discípulos, a orillas del Lago de Tiberias. Sucedió de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, al que llamaban el Gemelo, Natanael, que era de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos de Jesús. Simón Pedro les dijo: Voy a pescar.

Ellos contestaron: Nosotros también vamos contigo. Fueron, pues, y subieron a una barca; pero aquella noche no pescaron nada. 

Cuando comenzaba a amanecer, Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no sabían que era él. 

Jesús les preguntó: Muchachos, ¿no tienen pescado? Ellos le contestaron: No.

Jesús les dijo: Echen la red a la derecha de la barca, y pescarán. Así lo hicieron, y después no podían sacar la red por los muchos pescados que tenía. Entonces el discípulo a quien Jesús quería mucho, le dijo a Pedro: ¡Es el Señor!

Apenas oyó Simón Pedro que era el Señor, se vistió, porque estaba sin ropa, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron a la playa con la barca, arrastrando la red llena de pescados, pues estaban a cien metros escasos de la orilla. 

Al bajar a tierra, encontraron un fuego encendido, con un pescado encima, y pan. Jesús les dijo: Traigan algunos pescados de los que acaban de sacar. Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la playa la red llena de grandes pescados, ciento cincuenta y tres; y aunque eran tantos, la red no se rompió. Jesús les dijo: Vengan a desayunarse.

Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían que era el Señor. Luego Jesús se acercó, tomó en sus manos el pan y se lo dio a ellos; y lo mismo hizo con el pescado.

Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de haber resucitado.

Terminado el desayuno, Jesús le preguntó a Simón Pedro: Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos? Pedro le contestó: —Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Cuida de mis corderos.

Volvió a preguntarle: Simón, hijo de Juan, ¿me amas? Pedro le contestó: Sí, Señor, tú sabes que te quiero.

Jesús le dijo: Cuida de mis ovejas. Por tercera vez le preguntó: Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?

Pedro, triste porque le había preguntado por tercera vez si lo quería, le contestó: Señor, tú lo sabes todo: tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Cuida de mis ovejas. 

Te aseguro que cuando eras más joven, te vestías para ir a donde querías; pero cuando ya seas viejo, extenderás los brazos y otro te vestirá, y te llevará a donde no quieras ir. Al decir esto, Jesús estaba dando a entender de qué manera Pedro iba a morir y a glorificar con su muerte a Dios. Después le dijo: ¡Sígueme!

 

Reflexión:

En nuestra vida ordinaria, con todo nuestros quehaceres y responsabilidades, Jesús se nos aparece, como a los discípulos, y nos ayuda y guía en nuestra vida. No le importa como seamos o que hayamos hecho, nos busca, se ocupa de nosotros, de nuestro bienestar.

Tengo que saber reconocer su presencia y escuchar lo que me dice, a través de diversas maneras, en mi vida ordinaria, cada día: Él me pregunta ¿cómo estás? … si la cosa no va bien, me invita a cambiar de perspectiva, “tira la red a la derecha” … y sobre todo me pregunta si lo amo … Si lo amo, es porque lo conozco; si le hago caso, es por que lo que me propone es para bien, para crecer, mejorar y así, poder colaborar mejor en su misión: cuidar de los demás, como Él lo hace conmigo.

 

¿Cómo puedo aprender a reconocerlo?... ¿Qué tanto más necesito conocer a Jesús?… ¿Cómo respondo a la invitación a amar como Él me ama?...





domingo, 24 de abril de 2022

Segundo Domingo de Pascua

 #RecursosParaVivirMejor

Para esta Segunda Semana de Pascua, el evangelio de hoy nos narra el encuentro de Jesús Resucitado con sus discípulos, leamos la Palabra e imaginemos como si estuviéramos presentes, allí en el lugar donde se escondían los discípulos, poniendo atención a lo te hace sentir la lectura y a qué te invita:

 

Evangelio según san Juan 20, 19-31:

Al llegar la noche de aquel mismo día, el primero de la semana, los discípulos se habían reunido con las puertas cerradas por miedo a las autoridades judías. Jesús entró y, poniéndose en medio de los discípulos, los saludó diciendo:

—¡Paz a ustedes!

Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Y ellos se alegraron de ver al Señor. Luego Jesús les dijo otra vez:

—¡Paz a ustedes! Como el Padre me envió a mí, así yo los envío a ustedes.

Y sopló sobre ellos, y les dijo:

—Reciban el Espíritu Santo. A quienes ustedes perdonen los pecados, les quedarán perdonados; y a quienes no se los perdonen, les quedarán sin perdonar.

Tomás, uno de los doce discípulos, al que llamaban el Gemelo, no estaba con ellos cuando llegó Jesús. Después los otros discípulos le dijeron:

—Hemos visto al Señor.

Pero Tomás les contestó:

—Si no veo en sus manos las heridas de los clavos, y si no meto mi dedo en ellas y mi mano en su costado, no lo podré creer.

Ocho días después, los discípulos se habían reunido de nuevo en una casa, y esta vez Tomás estaba también. Tenían las puertas cerradas, pero Jesús entró, se puso en medio de ellos y los saludó, diciendo:

—¡Paz a ustedes!

Luego dijo a Tomás:

—Mete aquí tu dedo, y mira mis manos; y trae tu mano y métela en mi costado. No seas incrédulo; ¡cree!

Tomás entonces exclamó:

—¡Mi Señor y mi Dios!

Jesús le dijo:

—¿Crees porque me has visto? ¡Dichosos los que creen sin haber visto!

Jesús hizo muchas otras señales milagrosas delante de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero éstas se han escrito para que ustedes crean que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que creyendo tengan vida por medio de él.

 

Reflexión:

Jesús Resucitado, se aparece ante los discípulos, con tres gestos muy importantes:

(1) Les da Paz: para que salgan del miedo y sigan la vida… (2) Les envía a la misión: colaborar y hacer presente el Reinado de Dios, principalmente entre los más necesitados, como Él mismo lo hizo… quiere que reflejemos su imagen, en el lugar donde estemos… (3) Les da el Espíritu Santo, el ruah, que es viento, soplo de vida, que anima, fortalece y da sabiduría para llevar al cabo la misión.

Hoy si estamos abiertos al Resucitado, también nos concede lo anterior, a pesar de nuestras debilidades e incredulidades (como la de Tomás).

 

¿Algo me impide creer en Jesús Resucitado?… ¿Qué miedos tengo, que me impiden disfrutar la vida?... ¿Cómo colaborar con Jesús para hacer presente su Reino de amor y fraternidad?

 

#BuenDomingo #OremosPorLaPAZ

 

Alfredo Aguilar Pelayo

alfredo@ccrrsj.org

www.ccrrsj.org




sábado, 16 de abril de 2022

¡Feliz Pascua de Resurrección!

 

Reflexiones Buena Nueva

#RecursosParaVivirMejor

17/04/2022

¡Feliz Pascua de Resurrección!

Este Domingo celebramos el día más importante del año: EL TRIUNFO DE LA VIDA.

Con la resurrección de Jesús, comenzó una nueva etapa de la humanidad, inició el proceso de comprender toda Palabra dicha por Jesús y un nuevo sentido de vida para quiénes aceptamos y creemos en Él.

Leamos el evangelio que da fe de la resurrección:

Juan 20, 1-9

El primer día después del sábado, estando todavía oscuro, fue María Magdalena al sepulcro y vio removida la piedra que lo cerraba. Echó a correr, llegó a la casa donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo habrán puesto”.
Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos iban corriendo juntos, pero el otro discípulo corrió más aprisa que Pedro y llegó primero al sepulcro, e inclinándose, miró los lienzos puestos en el suelo, pero no entró.
En eso llegó también Simón Pedro, que lo venía siguiendo, y entró en el sepulcro. Contempló los lienzos puestos en el suelo y el sudario, que había estado sobre la cabeza de Jesús, puesto no con los lienzos en el suelo, sino doblado en sitio aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro, y vio y creyó, porque hasta entonces no habían entendido las Escrituras, según las cuales Jesús debía resucitar de entre los muertos.

 

Reflexión:

Llegan a la tumba de Jesús los discípulos, avisados María Magdalena, no está dentro, los vendajes están “ordenados” sobre el piso y el sudario aparte; lo que indica que está bien que no esté, pues, quien fue muerto tres días atrás, resucitó … trascendió, sigue estando vivo; los apóstoles y seguidores experimentaron su presencia viva, y dieron testimonio de ello.  La muerte no fue el fin, sino el comienzo de una nueva vida, para ellos y ahora para nosotros. Resucitar, es estar vivo y presente.

Para nosotros, después de la Cuaresma (o de cualquier cualquier tiempo de conversión), a través de oración (me acerco y conozco a Dios Padre), de limosna (que me acerca a los demás, al compartir de lo que tengo y puedo) y del ayuno (me contengo y no consumo lo que no me da o genera vida), le sigue la Pascua de Resurrección: paso de la muerte a la vida.

Resurrección es vivir de un nuevo modo, al estilo de lo enseñado por el Maestro Jesús, es seguir, comunicar y vivir su Buena Nueva, en palabra y obra; es vivir nuestra vida biológica, con el horizonte de una Vida plena, esa vida no es más que la misma Vida de Dios, comunicada al hombre, por Jesús.

¿Lo que me ha enseñado Jesús, me despierta a una vida nueva?… ¿Qué es aquello que tengo que dejar atrás, para poder vivir una vida que valga la pena vivir?... ¿Cómo puedo, cada día, nacer a lo divino, a lo pleno?

#FelizPascua

Alfredo Aguilar Pelayo

alfredo@ccrrsj.org

www.ccrrsj.org




sábado, 9 de abril de 2022

Domingo de Ramos de la Pasión del Señor

 Reflexiones Buena Nueva

#RecursosParaVivirMejor

10/04/2022

Este Domingo de Ramos inicia la Semana Santa, de la pasión y muerte de Jesús, el maestro de vida. Llegando a Jerusalén, centro político-social-religioso de Israel; es recibido “triunfalmente” por la gente, viene a celebrar la pascua judía (conmemoración de la liberación de la esclavitud de su pueblo en Egipto); en la cena anuncia su entrega total, por el Reino de su Padre, después es traicionado, arrestado, enjuiciado y condenado a muerte.

Para recordar (pasar por el corazón) lo que vivió Jesús, acompañarlo y aprender de él, te invito a leer en tu biblia, por esta ocasión, el evangelio según san Lucas 22,14-23,56 (o bien en internet: https://bit.ly/PasionDelSeñor), imaginando que estás presente en las escenas, poniendo atención a las palabras que se dicen, a las acciones y reacciones de quienes intervienen, de manera especial en Jesús…

 

Reflexión:

Jesús nos sigue enseñando, aún en su pasión y muerte (que es solo el preámbulo de su Resurrección y triunfo de la Vida) a través de su entrega total: fiel a la misión encomendada por su Padre; dando su vida, por amor a la humanidad; enfrentando y superando cualquier intento de dominio y traición; ofreciendo esperanza y reconciliación, aún a los victimarios,

Al conocer la Buena Noticia que proclamó Jesús, a favor de un reinado de justicia, de verdad, de fraternidad, compasión y misericordia, de amor … comenzando por los pobres, excluidos, descartados y oprimidos, podemos comprender, porque el poder político-religioso-social lo persiguió y mató. Su muerte fue resultado de la insensatez, egoísmo, sordera y necedad humana de quienes detentan el poder humano y no tienen el mínimo interés en el bienestar de los demás. 

Como dice Fray Marcos: “En la vida de Jesús se vuelve a escenificar el Éxodo, paso de la esclavitud a la libertad, de la muerte a la vida. Allí iba a dejar patente el amor incondicional”, resume toda enseñanza de Jesús, para que podamos ser libres, dejar de ser esclavos del pecado (que nos aleja de ser nuestra mejor versión de persona) y podamos tener vida, una que valga la pena vivir.  Es en la entrega y servicio a los demás, que liberamos nuestro potencial, generamos vida y nos salvamos.

 

¿Distingo las voces que engañan y generan muerte?… ¿Descubro a Dios, cada día, liberándome y dándome vida?... ¿Cómo puedo encarnar en mi vida, el mensaje de Jesús?...

 

#SemanaSanta #OremosPorMéxico

Alfredo Aguilar Pelayo

alfredo@ccrrsj.org

www.ccrrsj.org




sábado, 2 de abril de 2022

Quinto Domingo de Cuaresma 2022

 Reflexiones Buena Nueva

#RecursosParaVivirMejor

03/04/2022

 

Nos estamos acercando al final del tiempo de Cuaresma; se abre la puerta a la intensa experiencia pascual. Recorremos este camino de ayuno, limosna y oración, centrado en la persona de Jesús, para aprender de él a vivir de una manera más abierta, solidaria y justa... ¿Qué nos enseña hoy el maestro? Al leer el texto del evangelio de hoy, imagina que estás presente en la escena: mira que hacen las personas, escucha que dicen y como actúan … en especial Jesús:

 

Evangelio según san Juan 8, 1-11

Reflexión:

Jesús es un maestro, un pedagogo, … nos enseña como ser mejores personas; ante una trampa que le tienden, presentándole a una pecadora, nos confronta a cada uno, con nosotros mismos, para que antes de juzgar y condenar a otros, revisemos nuestras faltas de amor y caridad; para que primero nos corrijamos a nosotros mismos. Así, como se acerca a la mujer, se acerca a nosotros, nos perdona e invita a ser mejores personas y alejarnos de lo que nos impide:

·   siendo misericordiosos, ante quienes como nosotros son pecadores (tal vez menos que nosotros),

·   ser justos, y antes de condenar al otro, ofrecer una ayuda y posibilidad de rehabilitación, y 

·  no pecar (dañar a los demás, a uno mismo y a la creación).


Hoy Jesús nos enseña a ser justos y misericordiosos, como son Él y su Padre (cfr. Lucas 6, 36).

 

¿Reconozco que soy pecador?... ¿Qué puedo hacer para convertirme de mis faltas?... ¿Soy misericordioso y justo con los demás?

 

#BuenDomingo #OremosPorLaPAZenMéxico

 

Alfredo Aguilar Pelayo

alfredo@ccrrsj.org

www.ccrrsj.org